Este artículo que inagura mi blog va dedicado especialmente a aquellos chicos/as que os estáis planteando competir en alguna categoría de fisioculturismo
Algunos chicos/as cuando llevan un tiempo entrenando en el
gimnasio descubren que el trabajo con pesas y el entrenamiento en sala les
apasiona, al mismo tiempo que empiezan a ver vídeos sobre competiciones y a
seguir a atletas "del mundillo". Poco a poco empiezan a interesarse
por la nutrición viendo como sus cuerpos cambian y mejoran, pero no al
ritmo al que les gustaría. Es entonces cuando se plantean llegar a competir en
alguna categoría (bikini fitness, bodyfitnes men's physique...) pero como eso
significa dar un paso más necesitan la ayuda de un preparador que realmente les
indique el camino a seguir. Es aquí donde tenéis que ser críticos e informaros
muy bien sobre la experiencia de ese preparador y los resultados que han
obtenido sus atletas porque recordar: el mejor preparador no es aquel que tiene
el mejor físico ni el que ha ganado más títulos pues eso demuestra su gran potencial como atleta. Un "buen" preparador es aquel que sabe transmitir, aquel que se preocupa
por sus atletas no solo a nivel competitivo y de que salgan con un buen punto a
la tarima sino también a nivel emocional. Competir en fisioculturismo
requiere de un gran equilibrio mente-cuerpo que sino está presente podría
provocar diferentes desequilibrios tu vida.
Además tienes que valorar tus posibilidades económicas ya
que contratar a un preparador no suele ser nada barato y encima tienes que
añadir todos los gastos que requiere competir (suplementación, comida, bikini
o bañador, tinte, licencia...). Otro punto importante es que sea un preparador
que mire más allá del triunfo y con esto me refiero a que el "factor salud"
lo tenga en cuenta, ya que el riesgo de la preparación le vas a asumir tu y no
el. TÚ eres el que va a sufrir las consecuencias de una preparación agresiva y
mal hecha en la cual la salud ni siquiera se va a tener en cuenta. Durante el
transcurso todo puede ser muy bonito pero quizás al tiempo de competir te
lamentes por no haber pensado lo suficiente, por haber hecho caso solo al
corazón y no también a la razón.
Desconfía de aquel que te prometa resultados rápidos y que
te lo "pinte todo muy bonito". Esto es un proceso muy largo y no
requiere de meses sino de años el lograr el físico de los atletas a los
que admiramos. Por eso debes ser realista y objetivo, impidiendo que toda esa
ilusión que corre por tu cuerpo te ciegue y te impida ver la realidad. Si te
ves en esta situación párate a pensar lo siguiente: realmente te compensa
correr mucho para lograr un triunfo momentáneo que luego te hará caer porque tu
cuerpo o mente te dicen que ya no pueden más? Son bastantes los casos que
estoy viendo de chicos y chicas jóvenes que fruto de su ilusión y ansia de
victoria han hecho verdaderas locuras poniendo en riesgo sus vidas. Esto es
algo muy serio, y sí, habrán ganado un trofeo que tendrán en sus estanterías
para siempre pero sabéis? ese trofeo se ira llenando de polvo, sus nombre
posiblemente queden en la memoria de muy pocos y sufrirán secuelas de por vida.
Realmente quieres esto para ti?
Por todo esto debes informarte muy bien sobre la forma de
trabajar de ese preparador y de que tipo de preparaciones realiza.
Si finalmente entras en un equipo de competidores escucha a
tu mente y no hagas nunca algo de lo que no estés seguro. Tienes que sopesar
las cosas, tener en cuenta los pros y los contras de cada actuación antes de
tomar una decisión y si por lo que sea no te sientes cómodo o ese preparador te
persuade para hacer cosas que en tu filosofía de vida jamás tendrían lugar, da
marcha atrás y busca otra alternativa. Ten en cuenta que este deporte que has
elegido te tiene que hacer disfrutar y no sufrir, te tiene que hacer sentir
vivo y no apagado y por supuesto debes ver si vales o no ya que es más duro de
lo que la gente piensa. Requiere constancia y disciplina las 24 horas del día y
la mejor prueba para que veas si este es tu mundo o no es la siguiente: si
cuando vas al gimnasio haces cada repetición y cada serie a muerte, si tu mente
piensa en progreso constante día tras día, si la dieta forma parte de ti, si el
control de tu mente-músculo cuando entrenas es cada vez mayor, si disfrutas de
la congestión y de la sensación de cómo la sangre corre por tus venas cada vez
que entrenas, si empiezas a dar prioridad al descanso en vez de salir todos los
fines de semana, si te levantas a hacer cardio aunque llueva, haga frío o
calor, si reconoces cada esfuerzo, cada aliento y cada gota de sudor que has
derramado en el camino... Si realmente vas experimentando estas sensaciones no
esperes más! el bodybuilding no solo será tu deporte sino que además será tu
forma de vida.
Por último recordar <<que este debe ser un camino del
que disfrutéis y evidentemente tropezaréis o tendréis a veces la sensación de
querer abandonar pero si realmente el bodybuilding es vuestra pasión, si
realmente es el motor que mueve vuestras vidas, levantaos y tened claro que
para vosotros la palabra "rendirse o abandonar" no tienen cavidad en vuestro
vocabulario>>
Espero que os haya gustado esta publicación y que os haya
echo reflexionar. Un saludo para todos y no olvidéis darle a me gusta o dejar
algún comentario. Gracias
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